domingo, 4 de septiembre de 2016

Reflejos Básicos: El hogar de mi corazón


Conectar: Les proponemos realizar la siguiente dinámica con el objetivo de mostrar valor entre los integrantes del grupo resaltando cualidades positivas del otro.
Acordeón de Virtudes: Necesitan una hoja grande por cada integrante y una birome. Todos deben anotar su nombre en la parte inferior de la hoja. Cuando el guía lo indique todos deben rotar hacia la derecha la hoja al mismo tiempo. Cada vez que reciban una hoja, leer el nombre que se encuentra abajo y anotar en el renglón inmediato una línea describiendo una virtud de esa persona. Cuando termina de escribir la frase se dobla el papel y se vuelve a pasar a la derecha, el nombre siempre tiene que quedar a la vista. Con las sucesivas pasadas el papel se convertirá en un acordeón. Al terminar la ronda cada hoja volverá a su dueño y podrán leer las virtudes que los demás notaron en cada uno. Tomen un tiempo para expresar lo que sintieron al leer esas palabras

Crecer: Todos los bebés nacen con un reflejo llamado “de aprehensión“. Significa que cierran su manito con tanta fuerza sobre cualquier objeto a su alcance que esta fuerza podría aguantar su propio peso. Todos sabemos por experiencia propia que cualquier recién nacido es capaz de agarrarse con un vigor asombroso al primer dedo adulto que encuentre. Sin el contacto con otro ser humano no podría sobrevivir. De la misma forma, como cristianos necesitamos sentirnos amados y aprehendernos de la familia de fe para sobrevivir.
Lean el Salmo 84 en sus Biblias. El rey David anhelaba estar en presencia de Dios, permanecer en su templo. Los tiempos de guerra y los trajines de la vida cotidiana agobiaban el corazón del salmista. Solo en la casa de Dios encontraba refugio, paz y fortaleza para seguir adelante. ¿Qué versículos de este Salmo te identifican?

v  Preguntas para conversar y reflexionar:
¿Podes compartir algún testimonio de haber recibido visión y claridad de parte de Dios en medio de una reunión en el templo? ¿Anhelas estar en la casa de Dios? ¿Qué te hace pensar y sentir saber que somos templo de Dios? ¿Qué responsabilidades tenés hacia tus hermanos? ¿Te sentís parte de tu comunidad de fe?¿Qué riesgos tienen las ausencias reiteradas?¿Qué decisiones debes tomar para afianzar tu pertenencia?¿Cómo está tu relación personal con Dios? ¿Podes decir con certeza que tu pasión por el Señor te impulsa a hablar de su amor diariamente? ¿Cuál es tu herencia espiritual?

Adorar: Compartan un tiempo de oración dando gracias por la familia de fe, animándose unos a otros a permanecer.
"Dios mío, sólo una cosa te pido, sólo una cosa deseo: déjame vivir en tu templo todos los días de mi vida, para contemplar tu hermosura y buscarte en oración. " Sal 27:4 (TLA)

Siguiendo el link un hermoso tema musical para compartir con tu grupo:  Habitación - En Espíritu y en Verdad




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